Enfermedad de la voz

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Enfermedades de la Voz

La voz y el Lenguaje

Son cualidades exclusivas del ser humano y que lo diferencian de otros seres vivos, constituyendo la forma más importante de comunicación. Las alteraciones de la voz tienen gran importancia en la actualidad, no solo porque pueden ser debidas a alguna patología tumoral de cuerdas vocales, sino que ya en principio, representan un handicap para la comunicación y relaciones interpersonales, sobre todos en los profesionales que trabajan de cara al público y los profesionales del canto, sin olvidar que cualquier persona privada de una voz normal puede verse afectada.

Causas de los Trastornos de la Voz

Son múltiples. Las más frecuentes son:

-Pólipos

-Nódulos vocales

-Laringitis

-Edemas de cuerdas

-Malformaciones congenitas

-Parálisis de cuerdas

-Tumores

-Causas funcionales

Diagnóstico

Se realiza en consulta.

Actualmente el método de exploración fundamental más usado es la fibrolaringoscopia o rinofibrolaringoscopia, conectada a vídeo o a programas informáticos de captura de imagen, que permiten procesar y editar las imágenes obtenidas con gran seguridad diagnóstica y comodidad para el paciente.

Evitan exploraciones innecesarias con anestesia general.

La estroboscopia permite la visualización de las cuerdas vocales a cámara lenta y aporta defectos de las mismas no visibles en otras exploraciones.

Tratamiento

Los problemas de la voz muchas veces se tratan con medicamentos.

En otras ocasiones, ante la falta de respuesta a un tratamiento médico, se impone necesariamente una intervención quirúrgica para solucionar el problema o, en otras ocasiones, para la toma de una biopsia.

La rehabilitación foniátrica a cargo de un logopeda es un complemento fundamental del tratamiento en muchas ocasiones, sobre todo en los desordenes funcionales, propios de profesionales de la voz, cantantes y niños.

Cirugía

El procedimiento empleado se denomina microcirugía laringea. Se realiza siempre bajo anestesia general e intubación. Su duración no suele exceder los 15-20 minutos y la recuperación anestésica suele ser muy rápida. La extirpación de las lesiones se realiza mediante visualización microscópica. El procedimiento se realiza en régimen de corta estancia hospitalaria.

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